El artista representa El Parián, un mercado que ha existido desde hace siglos en Puebla, su estado natal. Este tipo de cuadros costumbristas permitió a los artistas mostrar un panorama más amplio de posibilidades pictóricas, cada vez menos condicionadas por el recato de la Nueva España. En la representación de este mercado y en muchas de sus demás piezas, Arrieta presenta una sociedad más diversa, mezclada e irreverente, más cercana a la realidad del México independiente.
Esta pintura pertenece a una serie que realizó Arrieta por encargo del empresario alemán Joseph Lang. Por muchos años estuvo fuera del país, hasta que en 1978 fue adquirida y repatriada, desde Europa, por el Banco Nacional de México.