Esta zona metropolitana del norte del país es la sexta con mejores resultados en cuanto a salud y bienestar, vinculados con índices de mortalidad y acceso a servicios de salud.
Esta ciudad incrementó más que cualquier otra del país la asistencia escolar de su población de entre 18 y 24 años en el último lustro.
Ocupa el octavo lugar nacional de zonas metropolitanas en cuanto a la utilización de energías asequibles y no contaminantes, con casi el 50% de sus viviendas que aprovechan la luz solar.